Considera usar la parada de autobús justo al frente para explorar la ciudad fácilmente. Te permite bajar en los lugares que más te interesan.

Encantador, encantador, encantador

La ubicación es simplemente perfecta, a solo 5 minutos de la Royal Mile. Disfruté del delicioso desayuno buffet por solo 15 libras, ¡los haggis fueron un gran inicio del día! Además, el personal que hablaba español era un verdadero plus, siempre listo para ayudarnos.

Lo recomiendo encarecidamente 🥰✨

La ubicación perfecta para dos o tres

días. La habitación era cómoda y siempre estaba limpia, aunque la presión del agua en la ducha no era buena. Además, el personal fue muy amable y servicial. En general, tuvo una buena impresión de la estancia en este hotel.

Ubicación perfecta con vistas impresionantes.

La ubicación es excelente, justo en el corazón de la ciudad y cerca de varios puntos interesantes como el Scott Monument y el Castillo de Edimburgo. La habitación era amplia, limpia y se sentía muy acogedora gracias a la calefacción eficiente. Cada mañana disfrutamos de un buen café y galletitas que hacían que iniciar el día fuera un placer. La verdad, lo mejor fue poder explorar la ciudad fácilmente desde allí.

La ubicación es excelente, justo frente a la estación de tren. Las habitaciones eran cómodas y limpias, pero hubo problemas con la presión del agua en la ducha y el aislamiento del ruido no era el mejor. El desayuno ofrecía una variedad interesante, aunque podría ser mejor.

Tuve una buena experiencia al disfrutar de un desayuno buffet que incluía haggis, algo nuevo para mí. La ubicación fue ideal y me permitió explorar fácilmente las atracciones cercanas. Las habitaciones eran cómodas y limpias, lo que siempre es importante cuando viajas solo.

La habitación era normalita, algo sucia y teníamos problemas con la presión del agua en la ducha. La ventana no daba al exterior, así que no teníamos buenas vistas. Pero por otro lado, la temperatura dentro de la habitación era cálida y acogedora. Además, el personal siempre estuvo atento a nuestras necesidades. Así que aunque la habitación tenía sus fallas, el ambiente del hotel fue en general acogedor.

Superó mis expectativas. La ubicación es perfecta, justo enfrente de la estación de tren, lo que facilitó nuestro traslado. La habitación era cómoda y siempre estaba limpia. Me encantó la calefacción, nunca pasamos frío, y cada día había galletitas, café y té para comenzar bien la mañana.

Ninguna queja.

Me quedé en Old Waverley y la ubicación fue increíble, justo en frente de la estación de tren. Las habitaciones eran cómodas y limpias, con un personal muy amable, especialmente los recepcionistas españoles que siempre estaban listos para ayudar. El desayuno buffet era elegante y tranquilo, una delicia comenzar el día.

lo recomendaría

Ubicación inmejorable, a dos pasos de la estación y con vistas impresionantes. Habitaciones cómodas y limpias, desayuno bufé muy bueno, aunque un poco limitado en opciones. Personal amable siempre dispuesto a ayudar. Ideal para disfrutar de la ciudad.

Aproveché una habitación doble estándar, en la que encontré el espacio limpio y razonablemente cómodo. Lo mejor fue la ubicación, justo frente a una estación de tren, lo que facilitó moverse por la ciudad y explorar sus rincones.

El desayuno dejó mucho que desear. el café realmente malo y el menú bastante limitado. También, habría apreciado que se mencionara que el acceso es a través de escaleras, ya que no hay ascensor desde la calle, lo que podría ser complicado para algunos.